Descripción: El Sodium Laureth Sulfate (SLES) es un surfactante aniónico ampliamente utilizado en productos de cuidado personal y limpieza. Derivado del aceite de coco o del aceite de palma, se utiliza principalmente por su capacidad para generar espuma y eliminar eficazmente la suciedad y el exceso de grasa de la piel y el cabello. Aunque a menudo es objeto de controversia, es un ingrediente seguro cuando se utiliza en concentraciones reguladas y enjuagables.
Propiedades
- Espumante, produce una espuma abundante y cremosa.
- Limpiadora, elimina eficazmente la suciedad, grasa y restos de productos.
- Emulsionante, ayuda a mezclar agua y aceites.
- Solubilizante, permite dispersar ingredientes insolubles en agua.
Beneficios
- Proporciona una limpieza profunda de la piel y el cabello.
- Facilita la eliminación de residuos grasos y productos cosméticos.
- Produce una experiencia sensorial agradable gracias a su espuma rica y cremosa.
- Es económico y eficaz, lo que lo convierte en un ingrediente común en productos de uso diario.
Cómo funciona
El SLES actúa reduciendo la tensión superficial entre el agua y las grasas, permitiendo que estas últimas se mezclen con el agua y puedan eliminarse al enjuagar. Su estructura molecular le permite rodear partículas de suciedad y grasa, formando micelas que se disuelven en el agua durante el aclarado. Además, su capacidad espumante mejora la sensación de limpieza durante su uso.
Origen
Se obtiene mediante la etoxilación del Sodium Lauryl Sulfate (SLS), un proceso que añade moléculas de óxido de etileno para suavizar su acción sobre la piel. Este ingrediente puede derivarse de aceites vegetales como el coco o el aceite de palma.
Compatibilidad
Es adecuado para la mayoría de las pieles y tipos de cabello. Sin embargo, puede ser demasiado agresivo para pieles sensibles o cabellos muy secos, especialmente si se utiliza en altas concentraciones o con frecuencia excesiva.
Estudios
- Investigaciones han demostrado que el SLES es menos irritante que el Sodium Lauryl Sulfate (SLS), pero puede causar irritación leve en concentraciones altas.
- Estudios clínicos destacan su efectividad como surfactante y agente limpiador en productos de higiene personal.
- Ensayos han validado su seguridad en formulaciones enjuagables y reguladas por las autoridades cosméticas.
Sostenibilidad
El SLES puede derivarse de fuentes renovables como el aceite de coco. Sin embargo, la sostenibilidad depende del origen de las materias primas y de los procesos de producción. Se recomienda buscar productos formulados con SLES de fuentes certificadas y sostenibles.
Cómo se siente en la piel y el cabello
Deja una sensación de limpieza profunda, aunque puede resecar ligeramente la piel o el cabello si no se combina con ingredientes hidratantes o suavizantes.
Precauciones
Es seguro en concentraciones reguladas y productos enjuagables. Sin embargo, en pieles sensibles o uso prolongado puede causar sequedad o irritación. Se recomienda evitar el contacto prolongado con los ojos y optar por formulaciones equilibradas para minimizar el impacto.